Chile la Memoria Prohibida en Tres Dimensiones

La historia de este libro prohibido es muy particular, en el tiempo se tejen relatos que se entrelazan de forma poco habitual, es inexplicable. Momentos, aparentemente dispares, convergen en un punto crucial: la memoria. En este artículo, exploraremos cómo en La Memoria Prohibida, el libro de Augusto Góngora, y La Memoria Infinita, el documental dirigido por Maite Alberdi, se entrelazan narrativas profundas sobre hechos mandados a ocultar en un pasado no muy lejano, el posible olvido de futuras generaciones y la resistencia a construir memoria pase lo que pase.

La Memoria Prohibida:

Escrito entre 1982 y 1987, este libro es un testimonio valiente de los oscuros días de la dictadura chilena.

Augusto Góngora, periodista y líder de un equipo de investigación, recopiló información crucial sobre los horrores vividos durante ese período, insumo que le da vida al libro.

La Memoria Prohibida revela la represión, los desaparecidos y la lucha por la verdad en un Chile convulsionado y amenzado por la mano de la dictadura criminal de Pinochet.

El Libro de un equipo de investigación:

Augusto Góngora, más allá de su papel como periodista, se convierte en uno de los lideres del equipo de investigación que lo componian Eugenio Ahumada, Javier Luis Egaña, Carmen Quesney, Gustavo Saball y Gustavo Villalobos y es Rodrigo Atria quien da vida al texto del libro. Todos guardiánes de la memoria colectiva de Chile.

Su obra colectiva es un faro que ilumina los recuerdos silenciados, los testimonios ocultos y las heridas que aún siguen dividiendo a muchos chilenos.

La Memoria Infinita:

Este documental, nos sumerge en el mundo intimo de los ultimos días del peridista de la memoria prohibida, ahora dignosticado con Alzheimer.

A través de la historia de Augusto Góngora y Paulina Urrutia, descubrimos cómo el amor y la memoria se entrelazan y se resisten al olvido.

La Memoria Infinita nos recuerda que la memoria es frágil, pero también infinita que puede ser la memoria, al ser consecuente en tu vida, la muerte no existe, porque los actos lanzados en vida no se detendrán jamás.

Concluciones:

Podemos decir que el amor prevalece, de primera suena muy cliché. Entonces podemos ir a la paradoja de escribir un libro para no olvidar, y poco a poco se comienza a perder la memoria, se va borrando todo lo hecho, como si alguien lo hubiera dictado, en esta segunda conclusión le damos mucho crédito a los malos.

Me quedo con un libro que seguirá su camino y se reproducirá tantas veces como Chile lo crea necesario, me quedo con ese intimo amor verdadero y esencial que no necesita palabras ni memoria, y como broche de oro, me quedo con una obra cinematográfica, que se encargó de dejar todo debidamente documentado.

Ojala podamos reflexionar acerca del alcance de nuestras acciones, sobre la memoria que vamos construyendo, y sobre todo de nuestra fragil humanidad y nuestra responsabilidad de recordar porque el conocimento se construye día a día.

.