Hace unos años el libro era por esencia sinónimo de cultura, aunque aún sigue siendo un icono del “saber”, esta imagen ha evolucionado y para las nuevas generaciones el libro puede representar la cultura de sus padres, esto gracias al fácil acceso de los nuevos medios, muchas veces más efectivos y actualizados.
Los nuevos medios evolucionan y se vuelven más cotidianos, el libro y los impresos de consulta parecen quedar atrás; por esto la industria gráfica apuesta por darle al impreso nuevas características y posibilidades que lo pongan al nivel sus competidores (“nuevos” medios).
La urgente necesidad que han adquirido los impresos por ser competitivos frente a medios como la televisión, la internet, las aplicaciones multimedia y hasta los videojuegos, han hecho que los editores apuesten a métodos de hacer que el producto impreso presente novedades y nuevas características.
La reciente inclusión de una pantalla de video en una revista de amplia circulación indica la urgencia con la que muchos editores intentan ganarle la batalla a otros medios; así sea solamente creando fusiones de medios ya existentes como en el ejemplo citado. También se ha visto la utilización de tintas electrónicas que permiten textos dinámicos, la utilización de elementos sensibles dentro de las publicaciones como la utilización de olores en catálogos de perfumes.
Otra tendencia que se ha vuelto cotidiana es incluir junto con cada ejemplar de una revista, un cd o dvd con contenidos multimedia que pueden ser complementos del contenido impreso o bien explicaciones o tutoriales sobre ciertos temas referentes a la publicación.
Actualmente casi todos las publicaciones periódicas impresas tiene un soporte digital online en donde además de archivar los contenidos ya impresos, se puede acceder a contenido multimedia que complementan la información publicada en el impreso.
El desafío consiste en incorporar la tecnología y las competencias que le permitan al impresor ofrecer un portafolio de productos y servicios más amplio, sin olvidar que se espera que esos resultados sean, además de atractivos, ecológicamente correctos.
En la evolución el que sobrevive no es el más fuerte o el que tiene las maquinas más grandes, sobrevive el impresor que se adapta a las nuevas tecnologías y exigencias del medio.
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