La palabra Proxy es una forma abreviada del término inglés procuracie que significa “procurador” o “intermediario”. Un proxy puede referirse a una persona autorizada para actuar en nombre de otra, o puede designar la función o autoridad de servir en lugar de otro. Pero, ¿cómo funciona una proxy en el mundo tecnológico? ¿Cómo afecta un proxy el uso de internet?
¿Qué es un proxy?
Un proxy en una red informática, es un programa o dispositivo que realiza la tarea de enviar y recibir información en nombre de otro ordenador, por ejemplo:
Una Máquina-A necesita un recurso que está alojado en otra Máquina-C de la misma red, pero hará la solicitud mediante una petición a la máquina “Servidor Proxy”. Entonces, la Máquina-C no sabrá que la petición procedió originalmente de la Máquina-A.
El servidor proxy intercepta las conexiones de la red que un cliente realiza hacia otro destino. Manejar las conexiones de esta manera proporciona ventajas de rendimiento, seguridad, anonimato, etc. Esta postura estratégica de “intermediario” se aprovecha para soportar una serie de funciones:
¿Cuáles son la desventajas del proxy?
Utilizar un proxy también tiene sus desventajas, como la posibilidad de recibir contenidos que no están actualizados, tener que gestionar muchas conexiones y resultar en un cuello de botella, o el abuso por personas que deseen navegar de forma anónima para realizar actividades ilícitas
- Rendimiento: Dependiendo de la configuración y la carga de trabajo del proxy, puede convertirse en un cuello de botella y afectar el rendimiento de la conexión a Internet. Esto es especialmente cierto en entornos donde múltiples usuarios acceden al mismo proxy simultáneamente.
- Privacidad limitada: A diferencia de las VPN, muchos proxies no cifran el tráfico de Internet, lo que significa que la información transmitida puede ser visible para terceros. Esto puede representar un riesgo de seguridad y privacidad, especialmente si se manejan datos sensibles.
- Contenido desactualizado: Si un proxy utiliza caché para almacenar temporalmente el contenido web solicitado, existe la posibilidad de que los usuarios reciban información desactualizada, lo que puede afectar negativamente la experiencia del usuario.
- Restricciones de acceso: Algunos proxies pueden aplicar restricciones de acceso a ciertos sitios web, protocolos o puertos de red. Esto puede ser problemático si los usuarios necesitan acceder a recursos específicos que están bloqueados por el proxy.
- Abuso potencial: Los proxies pueden ser utilizados por personas malintencionadas para realizar actividades ilícitas, como eludir restricciones de seguridad o acceder a contenido restringido de manera no autorizada. Esto puede generar preocupaciones legales y de seguridad para los administradores de redes y los propietarios de los sistemas proxy.
VPNs, un tipo de proxy cada vez más popular
En los últimos años, el uso de proxies y servidores VPN ha experimentado un notable aumento entre el público general debido a su capacidad para sortear restricciones geográficas y bloqueos políticos en Internet.
Con la creciente popularidad de las plataformas de streaming, muchos usuarios recurren a estas herramientas para acceder al contenido de otros países que de otra manera estaría fuera de su alcance.
En regiones donde se imponen restricciones políticas sobre el acceso a ciertos sitios web, los proxies y las VPN se han convertido en herramientas indispensables para garantizar la libertad de acceso a la información y la expresión en línea.
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