Dirigida por Jon Favreau, la historia está basada en los cuentos de Rudyard Kipling publicados en 1894. La primera versión y famosa cinta animada que llevó la historia por primera vez al cine ya tiene 49 años, data de 1967.
Una realización costosa, se invirtieron 175 millones de dólares, pero Favreau advierte que está nueva versión podría haber sido aún más cara si se hubiese rodado en escenarios reales: “Un rodaje en un ambiente real sería difícil, no tendría tan buen aspecto y probablemente habría sido mucho más caro. Con un «chroma azul», se pueden hacer buenas cosas. Además, juegas un poco y si se te escapa una toma, puedes volver atrás fácilmente”.
El director y su equipo tuvieron que diseñar 70 especies de animales diferentes para la película. Esto suponía un problema, ya que los animales en su etapa adulta no enseñan la boca tanto como en la infancia. Favreau tenía en mente este detalle y decidió solucionarlo, en algunas escenas, elevando la cámara un poco más alto para que la boca de los personajes no se viera completa.
El director Jon Favreau (Iron Man) ha decidido llevar a la gran pantalla la famosa historia de Kipling mediante un mayor desarrollo de la tecnología usada por cintas como Avatar o Gravity. Y sin duda sus efectos especiales han dado que hablar y han sido premiados por en la temporada 2017 de los Premios BAFTA, la gala organizada por la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión.
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